Norwegian Air ha cautivado a los viajeros con vuelos baratos y ha dominado silenciosamente el mercado transatlántico durante los últimos años. He volado con ellos varias veces antes y, aunque siempre he apreciado la cabina moderna, limpia y espaciosa, a menudo me he lamentado del hecho de que en Norwegian, como en muchas otras aerolíneas económicas, todo, desde auriculares hasta mantas, cuesta un un poquito más. Recientemente, tuve la oportunidad de salir de la economía y volar de Londres a Nueva York en la cabina premium de Norwegian (también conocida como Norwegian Air Business Class), donde prácticamente todo, excepto algunos bocadillos, está incluido y los asientos son más cómodos.
Norwegian sigue siendo una aerolínea de bajo costo y el costo promedio de sus boletos premium, en comparación con la primera clase y la clase ejecutiva de otras aerolíneas, definitivamente lo refleja. En Norwegian, la clase premium no se trata de un exceso de lujo, sino de hacer que su vuelo largo sea más cómodo, para que llegue a su destino fresco, alimentado y con el menor desfase horario posible.
Norwegian Air Business Clase: Confort
El domingo por la noche llegué a Gatwick, el aeropuerto estaba abarrotado y un poco agitado. Después de registrar mi equipaje (Norwegian limita el peso total del equipaje de mano a 15 kilogramos), me dirigí al salón número uno al que tienen acceso los pasajeros de Norwegian Premium, con la esperanza de pasar un rato tranquilo. Era un salón bastante agradable, pero también estaba muy concurrido durante el tiempo y luché por encontrar un asiento.