Las posibilidades de que ocurran problemas más graves durante o después de la donación de plasma suelen ser pequeñas. Aún así, extraer sangre siempre presenta algunos riesgos.
Infección o inflamación localizada
Se puede desarrollar una infección si las bacterias ingresan al cuerpo a través de la punción de la aguja.
Los signos y síntomas incluyen dolor localizado, hinchazón y sensación de calor alrededor del sitio de la donación.
Cualquier persona que sospeche una infección debe comunicarse con el centro de donación.
Hematomas importantes
Durante la donación, si una persona tiene un hematoma grande o un hematoma pequeño que se presenta con dolor, el asistente debe detener la donación y aplicar una compresa fría.
La persona puede beneficiarse de seguir aplicándose compresas frías durante las próximas 12 a 24 horas y compresas calientes después de eso.
Si se produce sangrado, la persona debe aplicar presión en el área y levantar el brazo. Si los síntomas empeoran o el sangrado no se detiene, busque atención médica de inmediato.
Punción arterial
Durante una donación de plasma, un profesional de la salud extrae sangre de una vena, una de las vasos sanguíneos más pequeños. Si perforan accidentalmente una arteria en su lugar:
- La sangre será de color rojo brillante.
- La sangre abandonará el cuerpo rápidamente.
- Habrá una sensación pulsante en el tubo colector.
Si esto sucede, el asistente detendrá la donación de inmediato y aplicará una presión firme en el área durante al menos 10 minutos. Es posible que se necesite ayuda médica de emergencia.
Lesión e irritación nerviosas
Cuando un proveedor de atención médica inserta o retira una aguja, puede golpear un nervio. Esto puede resultar en:
- dolor agudo en el sitio
- entumecimiento u hormigueo en el brazo o los dedos
- dolor punzante en el brazo
- debilidad en el brazo
Si esto sucede, el proveedor de atención médica detendrá la donación y aplicará una compresa fría.
Una persona puede asistir a un seguimiento para asegurarse de que cualquier problema asociado reciba la atención adecuada.
Reacción al citrato
El citrato es una sustancia que se agrega a la sangre durante donación de plasma para prevenir la coagulación. Algunas personas tienen una reacción a esta sustancia.
Si esto sucede, la persona puede experimentar:
- una sensación de hormigueo en los dedos o alrededor de la nariz y la boca
- una pérdida de sensibilidad
Una reacción severa al citrato puede causar:
- escalofríos
- un pulso rápido o lento
- espasmos musculares
- dificultad para respirar
Sin tratamiento, esto puede provocar convulsiones, shock o paro cardíaco.
Un estudio ha sugerido que el citrato podría afectar la densidad ósea, ya que se une al calcio. Sin embargo, otras investigaciones no parecen confirmarlo.
Hemólisis
Este término médico se refiere a la destrucción de glóbulos rojos, que puede ocurrir durante una donación de plasma.
El daño puede hacer que la hemoglobina, una proteína de los glóbulos rojos, se filtre al torrente sanguíneo. Esto puede hacer que el plasma se vuelva rosado y que la sangre sea más oscura de lo habitual. Además, una persona puede ver sangre en la orina.
Si el asistente nota signos de hemólisis, detendrá el procedimiento y puede pedir ayuda adicional.
Embolia gaseosa
A veces, una burbuja de aire puede ingresar al torrente sanguíneo durante la aféresis. Esto puede ocurrir, por ejemplo, si hay un problema con la máquina. Si una burbuja llega a los pulmones o al cerebro, puede poner en peligro la vida.
Cualquiera que escuche un sonido burbujeante proveniente del sitio de la punción debe alertar al asistente.
Busque atención médica inmediata si ocurre alguno de los siguientes síntomas después de una donación de plasma:
- tos
- dolor de pecho
- cambios en la frecuencia cardíaca
- confusión
- otros síntomas inusuales
¿Qué es una embolia pulmonar?