Hechos + Estadísticas: Conducción bajo los efectos del alcohol

Los choques provocados por el alcohol son aquellos que involucran al menos a un conductor o un conductor de motocicleta con una concentración de alcohol en sangre (BAC) de 0.08 gramos por decilitro o más, la definición legal de conducción en estado de ebriedad. Según la NHTSA, 10,142 personas murieron en choques causados por el alcohol en 2019. Las muertes por choques causados por el alcohol representaron el 28 por ciento de todas las muertes por choques.

El alcohol es un factor importante en los choques de tránsito. Según datos del Departamento de Transporte de los EE. UU., Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA), 10,142 personas murieron en choques causados por el alcohol en 2019. Estos choques involucran al menos a un conductor u operador de motocicleta con una concentración de alcohol en sangre (BAC) de 0.08. gramos por decilitro o más, la definición legal de conducción en estado de ebriedad en la mayoría de los estados. Según la NHTSA, las muertes por accidentes causadas por el alcohol representaron el 28 por ciento de todas las muertes por accidentes en 2019, la proporción más baja registrada.

La Oficina Federal de Investigaciones estima que 1,024,508 conductores fueron arrestados por conducir bajo los efectos del alcohol o narcóticos en 2019. La tasa de arrestos equivale a un arresto por cada 222 conductores con licencia en los Estados Unidos.

Todos los estados y el Distrito de Columbia, excepto Utah, definen la discapacidad como conducir con un BAC (concentración de alcohol en sangre) igual o superior a 0,08 gramos por decilitro. En Utah, el límite de BAC se redujo a 0.05 en 2018. Los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley han podido medir el BAC con precisión durante décadas, y los resultados obtenidos de los dispositivos de prueba se aceptan en casi todas las jurisdicciones de los Estados Unidos.

Las campañas contra la conducción bajo los efectos del alcohol se dirigen especialmente a conductores menores de 21 años, infractores reincidentes y jóvenes de 21 a 34 años, el grupo de edad responsable de más accidentes mortales relacionados con el alcohol que cualquier otro. Los conductores jóvenes son los que menos responden a los argumentos en contra de la conducción en estado de ebriedad, según la NHTSA.

Para que los vendedores y meseros de licor sean más cuidadosos sobre a quién y cómo sirven bebidas, 42 estados y el Distrito de Columbia han promulgado leyes o jurisprudencia que responsabiliza legalmente a los servidores comerciales de bebidas alcohólicas por los daños, lesiones y muertes que causa un conductor ebrio. Treinta y ocho estados han promulgado leyes o tienen jurisprudencia que permiten a los anfitriones sociales que sirven licor a personas que posteriormente se ven involucradas en accidentes ser responsables de cualquier lesión o muerte.